La verdad es que este merengue me gusta tanto que soy capaz de comerlo a cucharadas!!! Sirve para muchas recetas, como por ejemplo para decorar tartas o cupcakes.
La preparación es un poco más complicada que la del merengue suizo, pero merece la pena. Yo utilizo el suizo cuando preparo merengue para hornear, pero para decorar en fresco, prefiero el italiano.
Vamos allá!
Ingredientes
200 g de claras de huevo (4-5 huevos)
400 g de azúcar
Agua, cantidad necesaria (aproximadamente una taza)
Separamos las claras de las yemas, con especial cuidado de que no se nos cuele ni una gota de yema. También podemos comprar las claras pasteurizadas en cualquier supermercado. Lo más importante es que estén a temperatura ambiente antes de montarlas. Las ponemos en la batidora y empezamos a montarlas.
Mientras tanto, en una olla, colocamos el azúcar y echamos el agua. Ésta debe cubrir ligeramente el azúcar, no más. Cuando empiece a hervir, bajamos a temperatura moderada, sin cortar el hervor. No revolver. Cuando el almíbar alcance los 121 ºc (unos 15 minutos) retiramos del fuego.
En éste punto, las claras ya estarán montadas, así que, sin parar de batir, vamos echando el almíbar en las claras. Seguimos batiendo durante 10 minutos más.
Algunas cosas a tener en cuenta:
Las cantidades de ésta receta son para cubrir y decorar un bizcocho de unos 28 cm de diámetro.
El merengue adquiere mucho volumen, así que si vuestra batidora es pequeña, preparar la mitad.
Si el bol de la batidora es metálico, cuando echemos el almíbar, se calentará bastante. Seguir batiendo hasta que al tacto este templado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario