Buenos días y feliz martes de carnaval para todos!!!
No hay confitería de España, en donde se vean en sus escaparates, platos llenos de orejas, filloas o rosquillas. Para quien no se anime a cocinarlas en casa esta bien, pero la verdad es que son bastantes caras, más si tenemos en cuenta que los ingredientes de la receta son poco y muy económicos, y que como debemos estirar la masa muy fina, nos salen muchas.
La receta es muy parecida a la de las tortas fritas de Argentina, menos por el anís y por la forma de estirar la masa.
Empezamos???
Ingredientes
500 g de harina
2 huevos
50 ml de anís (se puede reemplazar por esencia, pero no es lo mismo)
1 cucharadita de café de sal
120 g de azúcar glas
100 g de manteca de vaca cocida (se puede reemplazar por mantequilla)
Ralladura de 1 limón
Aceite de girasol para freír
Empezamos tamizando el azúcar glas. Lo ponemos en un bol y le añadimos los huevos. Con ayuda de unas varillas (o tenedor, como les sea más cómodo) formamos una pasta.
Agregamos la ralladura del limón, la sal y el anís.
Por último fundimos la manteca de vaca y se la añadimos a la mezcla anterior.
Ahora tamizamos la harina y de a poco la vamos agregando al bol. Al principio nos podemos ayudar con un tenemos o cuchara de madera, pero luego tendremos que amasar a mano hasta integrar toda la harina. No debemos agregar mas harina de la que marca la receta, porque sino la masa nos quedará muy dura.
Vamos a hacer unos pequeños bollitos de masa, y los iremos estirando de a uno. De ésta forma no añadimos harina a toda la masa.
Estiramos cada parte de masa con ayuda de un rodillo, lo más finito que podamos. Hay que espolvorear un poco de harina sobre la superficie de trabajo, pero sin pasarse, solo para que no se nos pegue la masa.
Para formar las orejas usé un cortador redondo grande, y con ayuda de un dedo, fruncí uno de los laterales para darle el típico aspecto. También podemos cortar un trozo rectangular con un cuchillo y hacer lo mismo con uno de sus lados.
Calentamos el aceite en una sartén y vamos pasando las orejas. Pondremos tantas como entren en la sartén, pero sin que se encimen. Cuando estén doradas les damos la vuelta y esperamos unos minutos. Sacamos y las ponemos sobre una fuente con papel absorbente.
Queda a gusto del consumidor espolvorearlas con azúcar glas.
A mi me gustas con azúcar glas por encima y frías, pero hay quien se quema los dedos por comerlas recién sacadas del aceite! ajjajajjaa...pero no diré nombres. Para aquellos que prefieren el carnaval con rosquillas, aquí tenéis la receta.
Solo me queda decir que es una receta fácil y que el truco principal está en estirarlas finitas. No hay secreto. Así que, disfrutad de éste martes festivo y preparadlas para una merienda especial!!!